“(…) a muchas mujeres no
sólo de Chigorodó sino de todo el mundo, nos toca asumir solas y con muchas
dificultades la crianza y el cuidado de los hijos. La salud mental de las
mujeres no es la mejor. Se puede observar que las mujeres maltratamos más a los
niños y a las niñas –descargamos en ellos toda nuestra furia, es algo
vergonzoso y lamentable, pero también hay que tener en cuenta que los hombres
nos maltratan más a nosotras. Los malos tratos provocan una cadena de desquites
a lo largo de la vida de las personas.
¿Qué hacer para cambiar las prácticas
violentas contra los niños y las niñas?
Las mujeres, las madres, padres
y cuidadores de los niños y niñas necesitamos atención en salud mental: En
primer lugar, necesitamos dialogar más, que alguien nos escuche, que podamos
tener acceso a programas de orientación psicológica. Necesitamos aprender a
auto-controlarnos emocionalmente, queremos aprender a respirar, queremos
expresar lo que sentimos. Si recibimos educación en relación a los daños que le
causamos a nuestros hijos, podemos aprender a corregir sin necesidad de
maltratar, desarrollaremos la capacidad de pensar antes de actuar”.
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Aportes de las madres del Programa
de Atención Integral a la Primera Infancia, -Estrategia De Cero a Siempre, Modalidad de Atención Familiar en el Barrio Kennedy, del operador Corporación PECAS, a través del
servicio del Círculo de Escucha y Diálogo Itinerante –CEDI.
AGRADECIMIENTOS
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